Aunque se sabía desde hace semanas, Microsoft hoy ha dado el aviso final a todos los usuarios de Windows Phone que no se actualizasen a Windows Phone 7.5 (Mango), la primera gran actualización que mejoró considerablemente los pocos terminales con Windows Phone que se han puesto a la venta.
El movimiento de Microsoft es extraño en el mundo de los smartphones, nunca se había obligado realmente a nadie a usar una nueva versión de un sistema operativo con una vida tan pronta. En otras ocasiones se han visto que se abandone el desarrollo para versiones antiguas, pero no que se obligase a actualizar si quieres poder descargar aplicaciones. Así Microsoft hoy cerrará el acceso a Marketplace a todos los usuarios que no tengan Windows Phone 7.5.
Y es una buena noticia. Sí, quizá se vea algo estremista el cerrar la posibilidad que no se puedan descargar aplicaciones, pero sin duda es una forma muy efectiva de animar a que los usuarios se actualicen a una versión más reciente, más completa y más estable que la anterior.
La mayoría de los teléfonos están ejecutando Windows Phone 7.5, lanzado el pasado otoño, por lo que la mayoría de vosotros no notará nada diferente sobre como Marketplace funciona. Sin embargo, si tu teléfono tiene una versión anterior de nuestro software instalado, pronto empezarás a ver un mensaje de error cuando intentes descargar una nueva aplicación, o actualizar una que ya tengas.
¿Está mal obligar a los usuarios a actualizar su smartphone? Windows Phone es un sistema cerrado al igual que iOS, si queremos algo “más libre” debemos irnos a Android, y la fragmentación por la no actualización de terminales son un verdadero quebradero de cabeza para miles de desarrolladores. Por lo tanto, a un nivel de que un sistema operativo sea estable para todos los usuarios, no es nada malo. Por supuesto, si estás más interesado en que tu terminal no cambie, no actualices, aunque Windows Phone 7.5 sea más estable e integre conceptos básicos como el copiar y pegar texto.
0 comentarios:
Publicar un comentario