Esta quizás es una de las preguntas que todos nos hemos hecho pero realmente no hemos conseguido una respuesta certera. Los usuarios de ordenadores portátiles estamos día tras día llevando nuestra fiel herramienta de trabajo de arriba a abajo, cumpliendo con su propósito original, por lo que al momento de cerrar la tapa del ordenador, nos preguntamos si debemos apagar, suspender o hibernar el portátil. La respuesta a esta pregunta depende de varios factores que en este artículo explicaré, como recomendación no sólo para alargar la vida de tu portátil, sino también para aumentar tu productividad.
Primeramente debemos tener claro que significa cada uno de estos términos para el ordenador, ya que aunque parecen ser muy similares, al todos dejar al ordenador inhabilitado para su uso y con la pantalla apagada, tienen grandes diferencias que, mientras para algunos son obvias, para otros son realmente confusas.
Hibernar supone un estado donde el portátil consume prácticamente nada de energía, y almacena su estado en el disco duro. Suspender el ordenador significa que el mismo entre en un estado de bajo consumo energético, y dicha energía es invertida en almacenar el estado del computador en la memoria, mientras el resto de las partes del mismo están totalmente apagadas. No obstante al consumir así sea un poco de batería tiene como consecuencia que luego de varias horas el computador entre automáticamente en “modo Hibernar”. Para finalizar, apagar el computador es tan sencillo como su nombre lo indica. Todos los componentes del ordenador dejan de consumir energía y se cierran todos los programas y tareas.
Teniendo estos conceptos en cuenta, podemos pasar a la parte más importante de la nota, elegir cuándo debemos realizar cada una de estas acciones.
¿Cuándo realizar cada acción?
Cada una de estas opciones sirve para diferentes situaciones, porque allí está el asunto, dependiendo de la situación es que debemos elegir si apagar, suspender o hibernar nuestro portátil, siempre pensando en qué tan rápido la necesitaremos “despierta” o cuánto tiempo pasará antes de usarla de nuevo.
Conozco muchas personas que dejan su ordenador encendido las 24 horas del día, los 7 días de la semana. Incluso siendo estos portátiles. Muchos aseguran que “los computadores se hicieron para estar encendidos”. Sin ánimos de debatir esta idea, lo que si puedo asegurar es que la batería del portátil puede salir muy perjudicada gracias a tenerlo encendido y conectado al tomacorriente todo el tiempo, además, todos sabemos que siempre es útil un reinicio para cerrar tareas en segundo plano que ni siquiera sabíamos que se estaban ejecutando.
Para mi es sumamente importante ejecutar una de las tres acciones que tratamos en este artículo cada vez que me retiro de frente al ordenador por una considerable cantidad de tiempo, a menos que lo haya dejado ejecutando una tarea. La cuestión está en saber cuál ejecutar, y gracias a mi experiencia y estudios de algunos expertos que he leído, les presento las mejores opciones:
Si estarás alejado del computador por poco tiempo, como por ejemplo una hora o menos, lo mejor que podemos hacer es colocarlo en modo suspensión, ya que rápidamente el portátil podrá “despertar” de su estado inactivo y podrás retomar el trabajo justamente donde lo dejaste de forma rápida.
En cambio si la cantidad de tiempo durante la cual estarás alejado del ordenador es mayor, o sencillamente no necesitas retomar tu trabajo lo más rápido posible, Hibernar es la opción ideal a elegir. En lo personal, es la acción que aplico todas las noches al momento de dormir, ya que ahorro energía y al día siguiente no tengo que esperar un reinicio completo y tener que abrir de nuevo un sin fin de cuentas y aplicaciones, algo que es realmente molesto.
Apagar el portátil es la opción más recomendable cuando no se va a utilizar por un largo período de tiempo. Sin embargo, mientras la mayoría preferimos poner a hibernar el ordenador, apagarlo podría ser la opción ideal para modelos más antiguos y con prestaciones bajas los cuales tienen dificultades al momento de salir del modo hibernar, por lo cual apagarlo o reiniciarlo termina siendo necesario. Además, en el caso de Windows o distribuciones populares de Linux como Ubuntu, siempre es necesario un reinicio ocasional.
¿Cuál es la mejor opción para tu computador?
Ahorrar energía y darle un descanso al ordenador son las principales razones a considerar al momento de pararte del sillón en tu escritorio o habitación y elegir entre apagar, suspender o hibernar el portátil, pero como podrás ver, factores como el rendimiento o incluso el modelo del ordenador son muy importantes al momento de elegir.
Recordemos que hablamos de computadores portátiles, también conocidos como Laptops en diferentes países, y estos sirven para moverlos de un lado a otro y en muchos casos darles un uso fraccionado dependiendo de los momentos libres que tengamos en un viaje, por ejemplo, así que hibernar el computador es quizás la opción más recomendable para una mayor duración de la batería y un trabajo pausado pero constante.
Además, el apagar constantemente los computadores tiene consecuencia dañina en los modelos de sobremesa, ya que los disco duros pueden chocar al girar y detenerse constantemente (problema que no sucede en los modelos con discos sólidos). Pero en los portátiles tenemos que tomar en cuenta la batería antes que nada, y el daño que puede suponer para ella el estar encendido todo el tiempo. Como mencioné antes, la opción más recomendable es el modo de hibernación, ya que el computador está en reposo, no perdemos toda la sesión de trabajo y podemos retomar con sólo algunos segundos de espera y lo más importante, la batería se consume a un nivel increíblemente bajo, tanto así que es prácticamente imperceptible.
Esas son mis recomendaciones basadas en experiencia de muchos años utilizando exclusivamente portátiles. Los comentarios están abiertos para conocer vuestras experiencias y recomendaciones sobre este punto que, finalmente, busca alargar la vida de los computadores.
